Jeff Koons, el artista vivo más cotizado, nos deja con un sabor de boca tan kitsch como nos podría dejar una barra de panela cubierta de melcocha.
Al parecer este señorsito estudio artes y después se hizo corredor de bolsa, años después decidió dedicarse a la producción de obra. Se casó con la polémica Cicollina, y produjo una serie pseudoporno de su esposilla y de él...
Ahora se dedica a fabricar objetos gigantes de acero...gonito...
Un corazonsote fabricado por sus subditos, fue comprado en 23,6 millones de dolares y expuso sus obritas gigantes en el Louvre causando gran controversia entre los críticos del High Art.
Pues bueno, como no hay mucho más que decir de esta gran cagada solo les dejo pensando en una frase sensiblona que no sé cuando la dijo cuando le preguntaron el por qué creaba semejantes artilugios: “quienes padecen necesidades económicas para que puedan llegar a imaginarse reyes”
Super kitsch no????